La venta de servicios, ya sea para personas o para empresas. La idea es tener un activo digital que ter perima atraer a los lectores, en un primer momento y luego, intentar que compren tus servicios.
Pensando, por ejemplo, que un médico puede tener interés en llenar una consulta médica, que un psicólogo puede tener interés en vender sesiones de una hora online y que un consultor puede tener interés en vender sus servicios de consultoría más allá de la ciudad donde vive, vendiendo por ejemplo un pack de horas de consulting en internet.
En este caso, la venta de horas de tu tiempo no es muy escalable. Así que no creo que sea un modelo de negocio poco intensivo en tiempo, si no todo lo contrario.
La segunda familia de modelo de negocios es la venta de productos físicos. Por un lado esta la venta de productos físicos, que es el e-commerce, con todos los problemas vinculados con ese tema, ya que una vez que tienes una venta en una tienda online, esto es solamente la mitad del proceso, pues luego tendrás que entregar esos productos físicos en casa de los compradores.
Para muchos un modelo de negocio algo limitado y, aunque sí puedas vender con tu tienda online en todo el mundo (o por lo menos en todo el mundo de habla hispana), también es cierto que es un modelo que es difícilmente escalable, porque vas a necesitar personal para todo lo que es el manipuleo y el envío a casa de los productos comprados.
Si gestionas una tienda online en solitario, no creo que sea tampoco un modelo escalable poco intensivo en tiempo, si no, una vez más, todo lo contrario.
Definitivamente no es lo mismo vender un producto digital que un producto físico. Los productos digitales resuelven problemas que hemos identificado con los productos físicos. Por ejemplo, piensa en un e-book, en un curso online, piensa en un curso en formato de audio.
Todo lo que es digital de forma nativa permite que, una vez que el usuario termina de comprar este producto digital, la entrega puede ser instantánea y no depende para nada de dónde está ubicado el cliente, con lo cual realmente tenemos aquí un producto de los buenos porque te permite vender y distribuir en un instante en cualquier parte del mundo.
La cuarta familia de modelo de negocios va básicamente, de la intermediación a la promoción. En general se trata de vender y promocionar productos de terceros.
Ahí podemos involucrar muchas cosas, pero digamos que las 2 familias de modelos de negocios más comunes serían, por un lado, la publicidad, los patrocinios. Imagínate que tienes tú una plataforma digital y has conseguido aglutinar una audiencia interesante en un nicho muy concreto de un mercado, con lo cual lo que tienes en mano es una audiencia segmentada.
Y hay varias marcas que también están operando en ese mercado, que pueden tener interés en promocionar sus productos a tu audiencia. Eso sería el modelo tradicional del patrocinio.
La gestión de esos patrocinios es poco escalable y consume mucho tiempo.
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