Además de definir el producto, el tipo de cliente al que te vas a dirigir y el mercado al que vas a pertenecer, hay otros aspectos a tener en cuenta: competencia, precio, marketing y liquidez.
Si estás leyendo este artículo, lo más seguro es que ya hayas evaluado algunos de los pasos que mencionaremos a continuación, pero creemos que es importante que no te saltes ninguno, por eso revisa esta lista para asegurar que tu idea de negocio es rentable.
Lo primero que debes preguntarte es: ¿Qué servicios voy a ofrecer? ¿Qué productos voy a vender? y empezar definiendo las ideas para poder avanzar.
Debes tener en cuenta que el producto cubra las necesidades del mercado actual y las condicones del tipo de cliente al que va dirigido tu productoo, tomando en cuenta las características: edad, sexo, estudios, situación económica, profesión, lugar geográfico… Cuanto más definido tengamos el tipo de cliente, mejor podrás enfocar el producto y llegar a él.
Para seguir definiendo tu negocio, es importante realizar un Estudio de Mercado para conocer los aspectos positivos y negativos de la idea, y así poder mejorarla.
Algunas de las preguntas qiue debes realizarte son: ¿Cuál es el mercado? ¿Cuál es nuestra competencia? ¿Es el momento adecuado para su lanzamiento? ¿El sector del negocio está en crecimiento? ¿A qué precio lo vende la competencia? ¿Cuánto estaría dispuesto a pagar el cliente por el producto/servicio?
Si hacen falta más preguntas que agregar a la lista, hazlo. Todo dependerá del sector al que te dirijas.
Esta parte del proyecto es una de las más importantes, porque invertirás un capital que podrás o no recuperar, dependiendo de la factibilidad de la idea.
Es recomendable que, en esta parte, consultes con un especialista en administración que te ayude a definir los siguientes puntos: inversión inicial del lanzamiento, costes fijos, costes variables, hacer un estudio de pérdidas y ganancias.
Una vez definida la idea de negocio, es necesario que pienses en cómo lo vas a vender. Para hacerlo debes definir una estrategia de marketing y revisar a través de qué plataforma harás publicidad.
Esta etapa del proceso es sumamente importante, por lo que debes definirla y ejecutarla muy bien, pues a corto, mediano y largo plazo garantizará el retorno de inversión.
Luego de completar estos seis pasos, estás listo para poner en marcha tu idea. Sin embargo, algo que debes considerar es la inversión necesaria para llevar tu negocio al plano digital. ¿Por qué? Porque si tu negocio no va a estar en Internet, nadie sabrá de él.
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